sábado, 9 de febrero de 2013

Ein ein

Definitivo, desde que tengo un Smartphone, soy cada día más mongo.

martes, 5 de febrero de 2013

Monegal

El programa de Ferran Monegal ha superado la prueba del cambio de horario, y aunque por culpa del traslado a los viernes me lo he perdido más de una vez (los martes, para mi gusto, era ideal), me sigue gustando su defensa de la dignidad del telespectador y su denuncia de las trampas de las cadenas. Además, Monegal ha sabido construir un personaje entrañable y muy próximo, que nos cae simpático a un buen número de espectadores. A fin de cuentas la televisión es espectáculo, y para analizarla y criticarla hace falta cierta dosis de ‘show' para que no sea un muermo. Y los ‘pollastres', ‘alerta' y otras coletillas de Ferran dotan al espacio de un tono entrañable que hace que su espacio sea singular, y divertido. Aunque tengo un gran respeto, cierta admiración y una buena dosis de estima por Empar Moliner, no acabo de ver claro su encaje en el programa. Al final parece que se intenta construir una entente tipo ‘Cuní-Rahola', pero el eje ‘Monegal-Moliner' no acaba de encajar. Es, sin duda, lo menos acertado del programa. Creo que Moliner está desaprovechada en su papel de buscarle los tres pies al gato a lo que dice Ferran. En todo caso, sería interesante que su sección, más que "criticar al crítico" fuera un micro-espacio en el que ella diera su punto de vista sobre algún espacio de tele. Vamos, que fuera la "crítica bis". Pero Telemonegal sigue mereciendo, en mi modesta opinión, un notable alto, rozando el sobresaliente.