viernes, 14 de diciembre de 2007
Un “pringao” de primera
Andy Bathies es un bombero británico de 37 años que llevado de su buen corazón decidió hace cinco años ayudar a una pareja lesbiana a tener un hijo, y les donó su esperma. Pero las dos chicas se separaron, la madre biológica está corta de pasta, y la administración británica ha decidido que el pringado de Andy, como es el padre biológico, contribuya al sustento de la niña. En resumen: mejor gasta tu leche haciéndote pajas contra una diana que pongas en la pared, que nunca se sabe si diez años después tendrás que comprarle bollycaos y play-stations a un churumbel con el que no contabas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario