domingo, 24 de febrero de 2008
¡Gran Bustamante!
En mi vida había escuchado dos canciones seguidas de David Bustamante, pero tras asistir hace unos días a un concierto suyo en Barcelona, he cambiado mi opinión sobre este gran artista. En la sala Duvet de Barcelona, y por gentileza de Cadena Dial, nos juntamos unas setecientas personas dispuestas a disfrutar del talento de este artista cántabro, que presentaba en la capital catalana su último trabajo, “Al filo de la realidad”.
Delante de mí había dos señoras de provecta edad, que se jugaban el tipo para subirse a una silla y sacar fotografías de su ídolo. Entre tirar fotos y enviar SMS a sus amistades para presumir de la suerte que tenían por estar allá se pasaron la hora que duró el concierto. Al sonar éxitos como “Si pudiera caminar sin ti” la sala se vino abajo, y la cohorte de fans que estaba organizado, y que seguro que ensayó sus consignas en un campamento organizado a tal efecto, comenzó a gritar cosas de este tenor: “Ese Busta, es, es”; “Eso sí que es, un peazo artista”; “David te queremos”; “David amigo, estamos contigo”; “Esto es una voz”; “Se nota, se siente, David está presente”. Creatividad pura.
Vino gente de Zaragoza y Lleida para disfrutar del concierto, y David obsequió a sus fans catalanes con un “Gràcies” con acento de Santander. Pero lo que importaba era el gesto. Al fondo, un buen número de adolescentes mostraban su principio de anorexia, que contrastaba con la buena salud que derrochaba Bustamante, mientras bailaban sin parar. Me lo pasé bien, y el “triunfito” ya tiene un nuevo simpatizante. Un fan no, que ya no tengo edad para esas cosas...
Delante de mí había dos señoras de provecta edad, que se jugaban el tipo para subirse a una silla y sacar fotografías de su ídolo. Entre tirar fotos y enviar SMS a sus amistades para presumir de la suerte que tenían por estar allá se pasaron la hora que duró el concierto. Al sonar éxitos como “Si pudiera caminar sin ti” la sala se vino abajo, y la cohorte de fans que estaba organizado, y que seguro que ensayó sus consignas en un campamento organizado a tal efecto, comenzó a gritar cosas de este tenor: “Ese Busta, es, es”; “Eso sí que es, un peazo artista”; “David te queremos”; “David amigo, estamos contigo”; “Esto es una voz”; “Se nota, se siente, David está presente”. Creatividad pura.
Vino gente de Zaragoza y Lleida para disfrutar del concierto, y David obsequió a sus fans catalanes con un “Gràcies” con acento de Santander. Pero lo que importaba era el gesto. Al fondo, un buen número de adolescentes mostraban su principio de anorexia, que contrastaba con la buena salud que derrochaba Bustamante, mientras bailaban sin parar. Me lo pasé bien, y el “triunfito” ya tiene un nuevo simpatizante. Un fan no, que ya no tengo edad para esas cosas...
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