miércoles, 21 de diciembre de 2005

¡Cuánta pluma!

¡Qué bonito ver al Padre Apeles y a la gran pornostar Celia Blanco compartiendo platea en el estreno de “Las Corsarias”, la impresionante revista que protagonizan Marlene Morreau y Malena Gracia! ¡Qué guay es ver a estas dos grandes vedettes cantar bellas canciones del verano y melodías de revistas clásicas! ¡Cuánto glamour, cuantos muslos, cuantas plumas, cuanto baile! La revista ha vuelto al Paralelo durante unas semanas, y he de rendirme al cuerpazo de la Morreau, que por mucha mierda que le lancen desde los programas televisivos dedicados a lo rosa, mantiene un tipazo de los que quitan el hipo. Incluso el guionista se permitió unas reflexiones humorísticas sobre las operaciones a las que ha sido sometido la artista francesa, y que la misma Marlene las pronunció con gran emoción. Al escuchar el mítico “Eva María se fue” estuve a punto de llorar de emoción. Y el “Aires de fiesta” consiguió que temblara en mi butaca. No importa que los numeritos cómicos del guión fueran dignos de la horca, es un espectáculo que se vive intensamente, y que disfruté hasta el final. Una curiosidad... ¿Por qué en las revistas las dos chicas que enseñan las tetas en los números de “apoteosis” las ponen siempre al fondo?

4 comentarios:

Svend dijo...

para solaz de tus ojos, aquí unas fotos de la dama en cuestión:
Marlene
Cuerpazo digno, sí señor, pero por qué estas modelos/artistas ponen esa cara de mala leche? Use dentiflor, sonría por favor, dientes blancos, buen frescoooor... desvarío, como de costumbre...

Anónimo dijo...

Marlene, que sueños, que tetas, que todo...

Anónimo dijo...

Con todo el respeto que te debo, el espectáculo ese es una mierda. Irlo a ver ya tiene delito -y asumo mi culpa- pero que te gusta es francamente preocupante. Joer, esas son tus referencias culturales? Tío, eres tan freak como Aramis Fuster y Paco Porras juntos. Y sí, los numeritos cómicos son dignos de la horca... como todo el resto. Hala, salud y a ver si escoges algo más interesante la próxima vez. Alimenta menos el cuerpo y algo más el espíritu, que no engorda.

Anónimo dijo...

Galaicoman, eres un ser lúbrico y soez, que deberías rezar por tus pecados y ponerte un cilicio en tu miembro para pagar la penitencia.