sábado, 20 de febrero de 2010
El Génesis de Robert Crumb
Robert Crumb ha pasado de ser un mito de la cultura underground made in USA de los setenta a revisar, con todo su arte, el libro del Génesis. No es un cómic para chavales, ni para los que se escandalizan fácilmente, porque es una versión cruda y dura, con desnudos y con viñetas poco amables. La principal característica de su versión es la adaptación sin interpretación, sin beatería ni blasfemia y sin un distanciamiento crítico. El texto está reforzado por una detallado y épico grafismo. La autenticidad y credibilidad adquieren una atención casi cinematográfica.
Bajo su pluma enérgica Adán y Eva, Noé, Abraham, Isaac, Sara y su múltiple descendencia adquieren un rostro, un cuerpo, una verdad carnal que nos los hace tan familiares que se convierten en nuestros parientes próximos, los modelos a partir de los cuales se ha fundado toda la humanidad. Trascendido por su tema, Crumb ha creado su obra magna. Desde Mr. Natural o el Gato Fritz no había creado algo tan brillante. No es fácil, pero el buen cómic nunca lo es.
Sin más rollos y artificios: me ha gustado mucho y os lo recomiendo. Y punto.
Bajo su pluma enérgica Adán y Eva, Noé, Abraham, Isaac, Sara y su múltiple descendencia adquieren un rostro, un cuerpo, una verdad carnal que nos los hace tan familiares que se convierten en nuestros parientes próximos, los modelos a partir de los cuales se ha fundado toda la humanidad. Trascendido por su tema, Crumb ha creado su obra magna. Desde Mr. Natural o el Gato Fritz no había creado algo tan brillante. No es fácil, pero el buen cómic nunca lo es.
Sin más rollos y artificios: me ha gustado mucho y os lo recomiendo. Y punto.
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