¡A soñar!

Los españolistas estamos emocionados con la posibilidad de jugar la final de la Copa de la UEFA, que este año se disputará en Glasgow. Ahora nos toca enfrentarnos a un “hueso”, el Werder Bremen, pero que nos quiten lo bailado. Estamos en semifinales, y lo que venga será un premio, un caramelo, porque hemos cumplido de sobra. Aunque tengo la sensación que este año va a ser nuestro año. Pero como es tradición en la historia blanquiazul pasaremos sufriendo y pasándolo mal hasta el último minuto...